Cómo cumplir tus objetivos académicos en la universidad: 9 consejos

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El secreto para cumplir tus objetivos académicos en la universidad es recordar que el éxito es relativo. Dado que todos tenemos diferentes prioridades, objetivos y valores, tu éxito puede ser muy diferente al de tu compañero de clase, y aún así ambos pueden tener el mismo éxito.

Tanto si eres un estudiante a tiempo completo en el campus, como si eres un estudiante no tradicional que combina los cursos con un trabajo, una familia u otros compromisos, tener éxito en la universidad está a tu alcance. Aquí tienes nueve consejos que te ayudarán a alcanzar tus objetivos académicos:

1. Conoce tus objetivos y valores.

2. Convierte los objetivos a largo plazo en planes a corto plazo.

3. Ve a clase y asiste a las horas de oficina.

4. Adquiere las habilidades necesarias para tus estudios.

5. Evalúa tu estilo de aprendizaje.

6. Intenta cosas nuevas.

7. Mantén un equilibrio social.

8. Maneja tu tiempo con intención.

9. Cuida tu salud.

Veamos con más detalle cómo puedes enfocar cada uno de estos consejos.

Cómo tener éxito en la universidad

Mientras lees estos consejos, ten en cuenta que puedes tomar lo que te resulte útil, dejar lo que no te funcione, y volver a las áreas que quieras revisar más adelante. No hay un camino "correcto" hacia el éxito, solo el camino correcto para ti, y tú puedes decidir cómo es ese camino.

1. Conoce tus objetivos y valores.

Reconocer tus objetivos puede ser una forma de visualizar tu versión del éxito. Reconoce qué es lo que estás tratando de lograr al seguir una educación y para poder iluminar tus valores, los cuales puedes usar para motivarte mientras trabajas hacia tu idea de éxito.

Por ejemplo, si tu objetivo es obtener una licenciatura para conseguir un trabajo, entonces puedes notar que valoras la independencia y el mantenerte a ti mismo. En última instancia, tu versión del éxito podría ser lograr la independencia.

Aferrarte a tus valores mientras interpretas tu éxito puede ayudarte a mantenerte centrado en tu versión individual del éxito y evitar caer en las trampas de la comparación.

Comprendiendo tus objetivos con preguntas poderosas

Si tienes problemas para averiguar tus objetivos y valores, intenta hacerte algunas preguntas poderosas. Las preguntas poderosas pueden invitar a la exploración y provocar una reflexión más profunda. La clave es ser honesto con uno mismo y no juzgar. Algunos ejemplos de preguntas poderosas que puedes hacerte son:

- ¿Qué quiero conseguir en la universidad?

- ¿Qué quiero lograr?

- ¿Cómo se siente el éxito?

- ¿Cuándo me he sentido exitoso en el pasado?

- Cuando pienso en una versión futura mejorada de mí mismo, ¿qué veo?

Lee más: ¿Cuáles son tus objetivos profesionales? Cómo averiguarlo

2. Convierte los objetivos a largo plazo en planes a corto plazo.

Ahora que tienes una idea de lo que significa el éxito para ti, puedes empezar a traducir tu visión en un plan de acción. Los planes de acción dividen los grandes objetivos en pequeños logros. Esto ayuda a que esos grandes objetivos sean más asequibles y te da la oportunidad de controlarte a lo largo del camino.

Un método para convertir los objetivos a largo plazo en planes a corto plazo es crear objetivos SMART. SMART es un acrónimo en inglés que se compone de las palabras Specific (Específico), Measurable (Medible), Achievable (Alcanzable), Relevant (Relevante) y Time-bound (Limitado en tiempo), y se define como:

• Específico: Identifica tu tarea.

• Medible: Determina cómo vas a medir tu objetivo.

• Alcanzable: Crea objetivos realistas sobre las cosas que están en tu control.

• Relevante: Enfócate en objetivos que te guíen hacia tu idea de éxito.

• Limitado en tiempo: Fija una fecha límite para mantenerte trabajando en la tarea.

Los objetivos SMART pueden ayudarte a mantenerte centrado en la consecución de tu objetivo final de forma manejable.

Así, si tu objetivo a largo plazo es obtener un título universitario, considera los requisitos individuales que tendrás que cumplir para obtenerlo. Uno de esos requisitos puede ser mantener un promedio mínimo de calificaciones. Crea objetivos SMART basados en elementos que puedas controlar, como el tiempo que dedicas a estudiar para una clase, que puede ser así:

"Mi objetivo es empezar cada día de la semana con una hora de estudio adicional durante las tres primeras semanas de clase."

Con este objetivo, puedes dirigirte hacia tu GPA ideal mientras te mantienes centrado en una de las cosas que puedes controlar: la cantidad de horas que le dedicas a tus estudios.

3. Ve a clase y asiste a las horas de oficina.

Sea cual sea tu medida del éxito, un aspecto clave para conseguirlo es ir tus clases. En términos de éxito académico, asistir a clase y a las horas de oficina puede afectar tu éxito general de varias maneras.

En primer lugar, la clase suele ser el lugar principal de aprendizaje. Si un profesor va a introducir un nuevo tema, a menudo lo detallará en clase y puede incluir información no cubierta en el libro de texto. La asistencia es la mejor oportunidad para obtener toda la información presentada. Como mínimo, establecer una presencia constante en la clase puede demostrar al profesor que te preocupas por hacerlo bien.

Lleva tu relación académica con tus profesores y asesores un paso más allá asistiendo a sus horas de oficina. Muchos estudiantes aprovechan las horas de oficina para aclarar conceptos confusos, averiguar sus calificaciones, recibir consejos sobre sus futuros objetivos profesionales o, simplemente, socializar.

Los profesores y los asesores tienen un sinnúmero de conocimientos—aprovéchalos para acercarte a tus objetivos. Y más adelante, cuando te prepares para la vida después de la universidad, ya sea en la escuela de posgrado o en la solicitud de empleo, estas son las personas a las que algún día podrías pedir una carta de recomendación.

4. Adquiere las habilidades necesarias para tus estudios.

A medida que avances en tu carrera, te darás cuenta de los distintos tipos de tareas que se repiten. Un estudiante de inglés puede tener que hacer múltiples redacciones, mientras que un estudiante de química puede trabajar con innumerables informes de laboratorio, y un estudiante de matemáticas puede hacer exámenes presenciales que requieren la memorización de complejas ecuaciones.

Si tu medida del éxito se basa en los logros académicos, deberías considerar la posibilidad de perfeccionar las habilidades por las cuales te examinan con más frecuencia. Toma nota de cómo puedes aprovechar tus puntos fuertes y trata de no juzgar tus deficiencias percibidas. Para ayudarte en tus áreas de mejora, es posible que tu centro o departamento disponga de otros recursos de revisión por parte de los estudiantes, como talleres de escritura o sesiones de estudio en grupo.

El beneficio de perfeccionar tus habilidades académicas probablemente se extenderá después de adquirir tu título: a menudo, las habilidades que te permiten tener éxito académico en tu especialidad son también las que se mostrarán a medida que hagas una carrera en un campo relacionado.

5. Evalúa tu estilo de aprendizaje.

El cerebro de cada persona procesa información de distintas formas. Averigua cómo aprendes mejor y los hábitos de estudio que se adaptan a tu estilo de aprendizaje para ayudarte a confiar en tu capacidad y tener éxito académico.

Para ayudarte a descifrar cuándo trabajas mejor, piensa en un examen o en un trabajo que hayas hecho bien. ¿Qué hiciste para prepararte? ¿En qué tipo de entorno realizaste tu trabajo? ¿Cuánto tiempo le dedicaste a la tarea? ¿Estudiaste solo o en grupo?

Consejos de estudio para personas con TDA, TDAH u otra neurodiversidad

Ciertas formas de neurodivergencias pueden interrumpir los consejos de estudio sugeridos habitualmente. Si padeces de un trastorno por déficit de atención (TDA), un trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o cualquier neurodiversidad, puedes beneficiarte de estas técnicas de estudio adicionales [1]:

- Desarrolla una rutina

- Date tiempo adicional para estudiar

- Toma descansos

- Reescribe tus anotaciones

- Manténte estimulado escribiendo en los márgenes, subrayando o leyendo en voz alta

- Manténte al día con una lista de tareas para hacer

6. Intenta cosas nuevas.

El éxito académico no es la única medida del éxito en la universidad. Puede que quieras utilizar tu tiempo en la universidad para aprender algo completamente nuevo o adquirir habilidades que no se han explorado completamente en tus otros cursos.

Si valoras la aventura y la exploración, otra medida del éxito puede ser la experiencia. ¿Te sientes satisfecho con tus estudios? ¿Te sientes desafiado de forma emocionante?

Para aprovechar la gama de cursos que ofrece tu escuela, toma clases diferentes que te parezcan divertidas. Utiliza tus cursos optativos para ampliar tus horizontes. Escoge una asignatura secundaria en un tema que te apasione. Puede hacer maravillas a tu cerebro, ayudándote a superar miedos, estimular la creatividad y conocer nuevas facetas de ti mismo [2].

7. Mantén un equilibrio social.

Junto con los estudios y las experiencias, otra forma de medir el éxito en la universidad es teniendo una vida social. Una de las ventajas de la universidad es que estás rodeado de personas con mentalidades similares, que probablemente tienen algunos objetivos parecidos, aunque sus valores y motivaciones sean ligeramente diferentes.

Mientras cumplen sus objetivos similares, pueden considerar cómo ayudarse mutuamente a conseguirlos. A corto plazo, podrías intercambiar notas con un compañero de clase o estudiar juntos para los exámenes.

Mientras tanto, las asociaciones que se forman en los grupos de estudio de la universidad y al participar en clubes y actividades co-curriculares pueden convertirse en asociaciones para toda la vida. Años después de graduarte, podrías apoyarte en esas relaciones cuando busques nuevas oportunidades de trabajo o consideres otros cambios en tu vida.

8. Maneja tu tiempo con intención.

La gestión del tiempo es una práctica diaria. Cuando se trata de alcanzar el éxito, utiliza tus objetivos para guiar la forma en que gestionas tu tiempo priorizando las tareas que te mantendrán en el camino deseado.

Por supuesto, no siempre es realista esperar que tus prioridades se alineen fácilmente. A veces, la vida pasa, y otros días, la procrastinación puede sacar lo mejor de nosotros. Un estudio en México indica que entre 70 y 90 por ciento de los estudiantes universitarios procrastinan en ocasiones, mientras que 20 a 40 por ciento lo hacen crónicamente [3].

Si puedes, incluye en tu agenda un tiempo determinado para lidiar con lo inesperado. Algunas personas se dan fechas de entrega más tempranas para los proyectos importantes, mientras que otras pueden programar unas horas a la semana para sentarse a pensar.

Si te encuentras con dificultades para priorizar tus objetivos universitarios, considera si tu estilo de vida y tus necesidades te permiten alcanzar tus metas de la manera que te propones actualmente. No evites cambiar tu rumbo: hay muchas opciones cuando se trata de obtener un título universitario, y para algunos estilos de vida, aprender a tiempo parcial o conseguir tu título en línea puede ser una opción más productiva.

9. Cuida tu salud.

Sobre todo, no puedes alcanzar el éxito sin cuidarte a ti mismo. Mantener tu salud mental y física es crucial para alcanzar tus objetivos, independientemente de lo que estos impliquen. Por ejemplo, la falta de sueño puede alterar la capacidad de funcionamiento de tu cuerpo [4]. 

Si estás asumiendo responsabilidades fuera del salón de clases, como obligaciones laborales o familiares, encontrar el equilibrio entre tus actividades académicas y sociales puede ser un reto. Asegúrate de darte cuenta cuándo te sientes mal y cambia las prioridades si es necesario o busca ayuda profesional si es necesario.

Cómo lograr el éxito en la universidad

Cuando alineas tus acciones con tus valores, puedes prepararte para el éxito en la universidad.

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